domingo, 14 de agosto de 2011

LLUVIA DE CASTIGO (Cap. 4)


Vamos allá con la cuarta parte de la lluvia:

Lluvia de castigo (Cap.4)

A partir de ahora todo se precipita con celeridad (toma chiste barato!... xD).



7 comentarios:

David Gómez Hidalgo dijo...

Se me ha hecho super corto, jejeje. Yo que me levanto con el ansia de leer un nuevo capítulo. Así dura más, jejeje.

Muy buena la imagen de los cascos y los paraguas reforzados y comparados con un carnaval.

Y la Esther, no sé que decirte, me sacaría de quicio como lo está haciendo con Juan.

La cosa sigue muy bien.

La semana que viene no te podré leer. No te preocupes. Lo leeré la siguiente, jejeje. No me olvidaré.
Saludos

Luis Bermer dijo...

Sí, es cierto que esta entrega es algo más corta; pero más que por extensión, lo he dividido por "escenas", con cierta unidad. No tendría mucho sentido cortar, por ejemplo, cada tres páginas exactas :)

En una situación así, creo que ocurriría algo similar a lo de los cascos/paraguas, porque lo que está claro es que en casa no nos encierra ni Dios... xDD

Y sí, a mi la Esther también me pondría de los nervios xD; pero me consta y sé que hay personas así; de hecho, creo que todos lo sabemos xD

Pues ya te digo que, cuando vuelvas, verás cambios, muchos cambios. Hasta ahora, la dinámica ha sido bastante uniforme -pero la historia lo requería, y por eso está-; ahora las cosas empiezan a ponerse eh... interesantes ;)

Gracias por seguir ahí leyendo y comentando. Siempre anima saber para quién es de interés lo que uno hace ;D

Hasta pronto, Bolz!

Neogeminis Mónica Frau dijo...

Sigue captando la atención del lector y los diálogos entre los dos personajes -tan distintos en la manera de buscar interpretar lo que no comprenden- surgen naturales, con lógica y sustancioso contenido.
Espero la próxima entrega.

Saludos.

Luis Bermer dijo...

Gracias Neogeminis.

No sé, a mí me da que actuaría de forma bastante similar a la del protagonista de estar en su piel.

Y para mí al menos, ahora es cuando de verdad se pone la cosa interesante :)

Gracias por tu visita.

Andreu Romero dijo...

"Sé lo que a ella le hubiese gustado, lo que esperaba de mí; como casi todas las mujeres: que me anticipase a sus deseos y actuase conforme a ellos, sin una sola palabra, sin preguntas, como prueba definitiva del conocimiento de su alma y mi amor por ella. Y cada vez que no acertase, frialdad, ostracismo, desapego en respuesta, como acicate para seguir intentándolo, para descifrar sus sueños y devenir en el perfecto caballero. ¿Cómo no conocer este viejo juego teatral y sus reglas? Ella esperaba mi comprensión, un mayor acercamiento a su credo, que rezásemos juntos incluso por el fin de la pesadilla. Dios sería una mujer si existiese, estoy seguro. Lo siento, Esther, nunca tuve vocación de actor, de interpretar un papel en las antípodas de mis ideas y sentimientos. Siento haberte defraudado. A mí también me hubiese gustado que comprendieras la absoluta desolación de quien no tiene donde agarrarse, refugio ni lugar adonde huir."

La Virgen... En su día, le habría dedicado este párrafo íntegro a alguien. Eres un poeta del sufrimiento humano, macho.
Creo que lo dijo Azra, que la lluvia iba a convertirse en tempestad y así está siendo. ¡Otro domingo bermenovita al bote! ^^

Andreu Romero dijo...

P.D.: Bueno, cambiando el "Esther" por otro nombre ^^U. Paranoia mía.

Luis Bermer dijo...

Gracias por tus palabras, Andreu, pero eso de "poeta del sufrimiento humano" queda muy "literaturístico" :D; yo sólo soy un tipo normal, que se fija en los detalles -y ha tenido una buena pila de años para hacerlo, por lo que no hay mérito :) -.

Entiendo lo que quieres decir. Lo entiendo bien. ¿Sabes? Casi todos tenemos la tendencia a pensar de nosotros mismos que somos "únicos", que nuestras ideas, formas de comportarnos, sentimientos son... "especiales". Luego llega la estadística y tira todo eso por tierra. Tus palabras, que hayas sentido "cercano" -como yo mismo- ese párrafo, de hecho, lo corroboran.

Y luego está el hecho de que me asquea (por haber leído bastante) la literatura de "cartón piedra", esa en la que notas que todo es mentira y el camino por el que el autor te quiere llevar y hasta dónde. Y, al menos, me esfuerzo en no escribir así. Otra cosa es conseguirlo alguna vez, claro xD

Sí, Azra tiene ojo... a ver si consigue averiguar dónde acaba esto ;D

Hasta pronto!