martes, 27 de marzo de 2012

MONKEY ISLAND 2: LECHUCK´S REVENGE SPECIAL EDITION (Pc)


Pues nada, que sigo recuperando el tiempo perdido jugando a los grandes clasicazos que me perdí en su momento. Si hace poco me deleitaba con la primera parte de esta "madre" de las aventuras gráficas, ahora le ha tocado el turno a su continuación. Y fíjate, que aquí no se aplica eso de las "segundas partes nunca fueron buenas". Porque esta es excelente, mejor incluso que su sucesora.

El tono, el humor, el universo siguen el fluir natural de la saga, sin grandes cambios, lo cual es todo un acierto. El bueno de Guybrush sigue desfaciendo entuertos, esta vez bajo la terrible amenaza de venganza de Lechuck, tras haberle dado lo suyo en la anterior entrega.

Ahora el territorio de exploración se expande a unas cuantas islas, que traducido viene a ser que nos juntamos con tropecientos objetos (y algunos sin utilidad, o al menos yo no se la encontré) y montones de escenarios con los que deleitar la vista. Porque los gráficos son una maravilla en HD; y esta vez he usado la opción del F1 para ver las pantallas de su versión original (de allá del remoto 1991, emocionante); y de la música lo mismo se puede decir: con ese aire caribeño-piratero y su inherente coña melódica. En cuanto a los puzzles, son de resolución bastante lógica y se avanza con rapidez y soltura (al igual que en la primera, me quedé enganchado en un par de sitios, por gilipollez mía, sobre todo); aunque hay que reconocer que algunos enigmas tienen bastante mala leche...

En resumen, juegazo imprescindible. Menos mal que me ha dado tiempo a jugarla antes de diñarla :P

6 comentarios:

Sergio dijo...

Grande, una puta obra de arte.

Mejor que el primero, pero en algunas cosas está por debajo: falta el duelo de insultos, joder, que es brutal; y la lucha final mola más la del primero, dónde va a parar.

Por lo demás, increíble.

Para mí, el mejor momento, sin duda, es:

http://www.youtube.com/watch?v=RMkSA7V1qFE

¡PURO JAZZ-BLUES!

Ah, y el final, ¡no me lo esperaba, me quedé de piedra! ¿No te pasó a ti?

En teoría, el Monkey Island 3 no debería poder ser. Pero bueno, está muy bien también. Sobre todo la intro XD. No le llega a la suela de los zapatos a los originales, pero está bastante guay. ¡Juégalo!

The arm's bone connected to the... heaaad's bone!

Luis Bermer dijo...

Es cierto, ese duelo de insultos se echa en falta; han intentado suplir con escenas similares (el concurso de gargajos, el "¡please, pleeeease!" haciendo el cansino...), se agradece al menos lo de no caer en la reiteración y vivir de las rentas ¿verdad?

La música es una pasada, y tu escena señalada... jeje, muy buena :D
Se me pasó comentar el final... realmente me sorprendió! Muy estilo de final de peli ochentera :D

Jeje, da por hecho que ese Monkey 3 caerá, amigo Sergio ;)

Neogeminis Mónica Frau dijo...

Alguna vez jugué versiones anteriores, con la excusa de mis hijas! jejeje
Les paso el dato, por si les interesa.
Saludos!

Luis Bermer dijo...

Pues coméntales a tus hijos la existencia de estas "Special editions"... te querrán aún más :D

Un abrazo!

Sergio dijo...

Se me olvidaba mencionar el maravilloso F1 de esta edición especial. Es una puta pasada el pasar de la versión nueva a la original sin ni enterarte.

Ah, y los comentarios de los desarrolladores. Realmente interesante aunque la mitad sean tonterías XD. Lo malo es que tienes que repetir las partes cuando hay diálogos, porque, o ves una escena del juego, o los comentarios de los desarrolladores.

Luis Bermer dijo...

Ese botón es una absoluta golosina nostálgica, pensada para aquellos que aún nos emocionamos cuando vemos pixelazos. Un guiño impagable, y más para mí, que no la jugué en su día.

Sí, Sergio. A mí también me fastidió bastante eso de no tener que elegir entre los diálogos de los desarrolladores y la escena. Aunque, la verdad, y como dices, son bastante chorras e improvisados. Podían haberse parado a dar detalles y anécdotas más interesantes, de las que tendrían miles. Pero en fin, ya se sabe que el ego manda ¬¬

En cualquier caso, una obra maestra absoluta. Que quede claro :)